Un presupuesto es un documento clave para conseguir clientes. Se trata de marcar la diferencia para que el presupuesto de una reforma sea el elegido. Tenemos que trabajar por demostrar nuestra profesionalidad y buen hacer. Solo de esta manera lograremos destacar y aumentar nuestra cartera de clientes.

La importancia de un presupuesto en una reforma

Hay que tener en cuenta que cuando una persona se decide por reformar un inmueble es lógico que vaya a considerar varios presupuestos. Estamos ante un proyecto que supone una importante inversión de dinero y molestias suficientes como para no elegir la empresa correcta.

Los presupuestos en las reformas son importantes porque ofrecen al cliente toda la información económica que necesita sobre su obra. Es decir, la cantidad total de dinero que habrá de pagar. Además, en este documento quedará reflejado el porqué de dicho pago. O lo que es lo mismo, las diferentes acciones que se van a acometer en la reforma. Solo así, podremos controlar y comparar resultados.

Claves para hacer un buen presupuesto de una reforma

Para que el presupuesto de una reforma sea el escogido por el cliente tenemos que seguir una serie de pautas. Ante todo ha de ser un documento de estructura clara y legible. No hay nada peor que entregar un presupuesto y que el cliente no sepa ni por dónde cogerlo. Estos son algunos consejos para su óptima elaboración:

  1. El presupuesto ha de ser una hoja explicativa ordenada. Procura no agrupar conceptos que no tengan que ver unos con otros. Es preferible que diseñes un apartado distinto, por ejemplo, para electricidad y otro para fontanería.
  2. Incluye la cantidad y calidad de los materiales que vas a utilizar. Estos siempre han de ser aprobados previamente por el cliente. El presupuesto de una reforma siempre debe incluir el precio final de los materiales escogidos.
  3. Explica los acabados finales para evitar malos entendidos con el cliente y tener que realizar trabajos de más.
  4. Desglosa todos los precios de las partidas por metros cuadrados o por unidades. Esta es una forma de que el cliente no perciba sobrecostes.
  5. Minimizar el riesgo de imprevistos. En toda obra siempre surgen pequeños detalles con los que no habíamos contado. Evitarlos es muy difícil, pero sí podemos controlarlos para que no disparen el presupuesto final. Analiza bien los puntos más delicados de la obra y tenlos en cuenta.

Conclusión

A fin de que nuestro presupuesto no sea rechazado debemos transmitir siempre transparencia. Se trata de elaborar un documento lo más claro posible para el cliente. Este ha de percibir que somos una empresa profesional y seria. Para ello, debemos incluir en él toda la información necesaria.

Por último, la contratación de una reforma necesita de confianza por ambas partes. Los clientes solo se quedarán con aquellas empresas que sepan transmitir profesionalidad y tranquilidad a los propietarios. Intenta que el presupuesto hable por ti y no escondas datos que sean claves para el precio final. Los negocios requieren de relaciones comerciales serias capaces de ser llevadas a cabo.