Las entidades financieras y bancarias aún no han adoptado e integrado lo que supone la Construcción 4.0 en su quehacer diario. Existe una dificultad creciente para entender lo que una hipoteca de un bien inmueble deviene cuando tenemos un bien inmobiliario “mueble” o movible. Mientras, fondos de inversión o empresas reaseguradoras abogan por la rapidez, la exactitud financiera, la precisión cronológica de construcción, etc. El sistema financiero español precisa de una mayor vinculación a estos procesos. Además, aparecen ya sistemas de crowdfunding, de “direct investment”, de sistemas cooperativos. que atacan a su línea de flotación.

Nuevos mecanismos de financiación del sector de la construcción para financiar una obra cuando se fabrica, pero no se construye.