Hemos introducido en el congreso el ámbito del diseño con letras mayúsculas.

Introducimos los grandes nombres del interiorismo para que el sector y la cadena de valor cuente con algo tan importante como hacer que el «diseño» sea accesible.

La experiencia debe ser mayor que el espacio y forjar nuevos estilos, el uso de la estructura, la forma… han de permitir superar las expectativas de los clientes y los usuarios.

Más que espacios, debemos crear atmósferas.

El factor humano marca la diferencia, una fuerte inspiración ecológica también. Y estos valores y tendencias en la vivienda, la hostelería, los lugares de trabajo se transforman en instalaciones para convivir o de alto lujo o para ser productivos gracias y solo gracias a los interioristas. El eslabón final de una cadena de valor de un proyecto de construcción.