La protección frente al ruido de los hogares y otra clase de inmuebles también se ha convertido en un factor clave en cuanto a confort se refiere. El aislamiento acústico en una casa, el lugar de trabajo, el lugar de trabajo, el lugar de trabajo, la vivienda, la propiedad, la propiedad. Para ello, una vivienda del ruido es importante conocer los diferentes tipos de materiales aptos para ello.

Cómo se mide la cantidad de ruido

Aunque, a veces, nos pase desapercibido vivimos rodeados de ruido. Tráfico, las obras en la calle, el ascensor de la casa, los vecinos … En definitiva, para una vida más cómoda.

Para ello, el aislamiento acústico tiene la solución. El ruido se mide en dB o decibelios, se ubica en el umbral de la audición del ser humano en 0. A partir de ese nivel se clasifican diferentes tipos de ruido:

  • 20 dB ambiente de biblioteca.
  • 90 dB el tráfico de la calle.
  • 100 dB ambiente de discoteca.
  • 120 dB umbral del dolor.
  • 130 dB un avión despegando.

Cuando una onda se oye, se escucha una parte de la energía que se desprende, se transmite, en el modo de calor y otra parte, se propaga hacia el entorno vecino. A fin de ganar en la salud se han inventado diferentes tipos de aislamientos acústicos que nos permiten diferenciar entre aislar y absorber.

 Cómo elegir el tipo de aislamiento acústico

El aislamiento acústico dificulta que las ondas de sonido puedan propagarse en un lugar a otro haciendo de barrera. Para ello, existen dos tipos de materiales:

  • Fonoaislantes: evitan la propagación del ruido hacia el exterior. Son los más recomendados para aislar los inmuebles del exterior.
  • Fonoabsorbentes: neutralizan casi totalmente la energía sonora y evitan el fenómeno eco. Son más indicados para mejorar la calidad acústica de lugares como salas de conciertos, teatros, auditorios, etc.

Para ello, disponemos en el mercado de diferentes tipos de aislantes:

  1. Espuma de poliuretano.
  2. Láminas de geotextil.
  3. Lanas de roca o fibra de vidrio.
  4. Planchas asfálticas.
  5. Corcho

Superficies sobre las que aplicar el aislamiento acústico

Se trata de pensar en que solo las paredes deben ser aisladas del ruido exterior con una insonorización mínima de 45 dB. Para que un bien mejorado en calidad y confort es necesario tener en cuenta también otras superficies, tales como:

  • Techos: los ruidos también pueden colarse a través del techo de una vivienda. Para mitigarlo se puede proceder a la construcción de un falso techo con paneles fonoabsorbentes. Una solución muy efectiva para pisos que tienen otra vivienda encima.
  • Suelos y pavimentos: los ruidos por impacto también suponen una molestia para lugares habitados como hoteles o pisos. Para ello, se suele proceder a la insonorización de los suelos con membranas termoacústicas insertadas en el pavimento.
  • Instalaciones: aire acondicionado, etc. El correcto aislamiento de las conductas y otros conductas mejora las molestias de su propio funcionamiento.

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